Juan Carlos Sotillo
cosasdejuancho2@gmail.com
Rastros de niños que juegan o que luchan contra lo que pretende armarles el camino, contra aquello que se dibuja majestuoso pero que tal vez no les pertenece |
Rastros de toda longitud: viejos, jóvenes, niños. |
Aunque el rastro puede ser dulcito también. |
|
El rostro se encandila y se le pierde el rastro. No se salva ni el prócer. Parece que así somos, que así vamos siendo, en estos andares que nos arma la vida. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario