domingo, 4 de julio de 2021

Edición N° 29 de Somos UBV Radio - ¡No te lo perdáis!

 


Hoy domingo 04 de julio de 2021 escucha en línea o descarga nuestro programa N° 29, y comparte con nosotros la alegría del premio otorgado en la categoría de periodismo radiofónico Carlos Zabaleta que entrega la Alcaldía Bolivariana de Maracaibo a esta revista radial producida por el equipo de Comunicación y Proyección Universitaria de la Universidad Bolivariana de Venezuela, desde el Eje Cacique Mara. A todos ustedes, gracias. En esta edición, En Pleno Marullo trae una reflexión sobre el suelo y la tierra fértil, en Psicología para el Pueblo sobre la formación de nuestra identidad cultural y en 5 Minutos una entrevista a nuestro querido poeta, narrador y periodista ya desparecido, pero siempre con nosotros Vidal Chávez López. También los invitamos a escuchar la entrevista al Rector de la Universidad Experimental Rafael María Baralt, Rixio Romero, con motivo de conmemorarse 211 años del nacimiento del escritor, historiador, filólogo y poeta Rafael María Baralt. Todo esto y mucho más en Somos UBV Radio.

https://zeno.fm/podcast/agxzfnplbm8tc3RhdHNyKwsSCkF1dGhFbnRpdHkYgIDQ58rFlgkMCxIHUG9kY2FzdBiAgNDnyK6OCAyiAQdsaWJyYXJ5/

No te lo perdáis.

miércoles, 30 de junio de 2021

Equipo de Somos UBV Radio ganó Premio Municipal de Periodismo Radiofónico

 

(Prensa UBV/Zulia)

Haz clic en la imagen para oír en línea y descargar los programas

El equipo de Comunicación y Proyección de la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV) Eje Geopolítico Cacique Mara, ganó el Premio Municipal de Periodismo Radiofónico "Carlos Zabaleta" 2021, que otorga la Alcaldía Bolivariana de Maracaibo.

Durante una transmisión en vivo efectuada la noche del lunes 28 de junio, el alcalde Willy Casanova anunció el veredicto del galardón que este año rindió homenaje a Vidal Atencio, periodista de amplia experiencia en los medios maracaiberos.

José Javier León, director del eje, celebró el triunfo obtenido por el equipo productor del programa Somos UBV Radio. "Estamos de júbilo, muy contentos recibimos este premio y desde la universidad, ratificamos nuestro compromiso con la comunicación, la cultura y la belleza", afirmó.

Somos UBV Radio se transmite los domingos por Eclipse 88.3 FM, Tricolor 92.7 FM y en diversas emisoras comunitarias de la ciudad. El programa es producido por los  profesores Antonio Fernández, Pablo Araque, Wilmer Medina, José Javier León y Miguel Fuenmayor, junto a Ana Cristina Chávez, coordinadora regional de comunicación y proyección universitaria.

A este grupo se suman en las secciones fijas, Doris Chávez (En 5 minutos), Néstor Montero Güerere (La UBV en la salud), César Pérez Jiménez (Psicología para el pueblo), José Padrón (Economía en contexto) y Lenín Parra (El pleno marullo radio).

Aunado a este reconocimiento, Ana Cristina Chávez obtuvo una mención honorífica en el Premio Municipal de Periodismo "Sergio Antillano", categoría Periodismo impreso informativo, con la entrevista publicada en la revista literaria Madriguera, y que se titula "El gallo pelón juega, lee y edita libros en Maracaibo".

Igualmente, el gobierno municipal otorgó el Premio a la Comunicación Militante, Alternativa, Comunitaria, Libre y Popular "Vidal Chávez López", dónde resultó ganadora en la mención audiovisual, Ambellyi Moreno, diseñadora gráfica adscrita al área de comunicación de la UBV Zulia, con el micro "Trucos para un cebollín más productivo en casa", presentado por su hija Abigaíl Cárdenas.

Así mismo, el profesor César Pérez Jiménez obtuvo la mención honorífica en la categoría Radio, con sus cápsulas "Psicología para el pueblo", que se transmiten en el programa Somos UBV Radio.

miércoles, 17 de marzo de 2021

Psicologia para el Pueblo en SomosUBV14


 

Más allá de la normalidad

Alguna vez nos hemos detenido a pensar qué es la normalidad y probablemente tenemos muchas respuestas. La normalidad es un concepto creado científicamente para regular las poblaciones, las sociedades y las culturas. Proviene de las ciencias naturales y refiere a lo normal, a lo que está dentro de la norma o responde a ella.

Entonces, antes de conocer la normalidad debemos tener claro qué es lo normal. Lo normal se refiere a todo aquello que es considerado valido, aceptado y aprobado, también es lo común, usual o frecuente, pero siempre respondiente a una regla que regula el estado natural de los hechos y de las personas, tanto individual como colectivamente.

Por ejemplo, una regla es creada por alguna institución o grupo de personas y de ello surge una dinámica en la que esa regla se convierte en común, usual y reproducida de manera sostenida por las sociedades. Es una regla la constitución de una nación, el curriculum educativo, las religiones, los contratos, pues de ellos se infiere una forma de comportamiento de las personas dentro de un patrón considerado natural, por tanto normal.

Lo normal es lo común de la cotidianidad tanto familiar, escolar, laboral y social. Es decir, es normal tener una familia, vivir en una casa, contar con servicios públicos, asistir a la escuela y a la universidad, es normal estudiar, pero también es normal trabajar, recrearse, tener amigos, pareja. Lo normal es a lo que estamos habituados, nunca lo normal es lo inesperado, lo imprevisto, o lo inusual.

De hecho la cuarentena puede considerarse un evento inusual en nuestras cotidianidades, y hasta anormal porque el curso de lo natural cambió de rumbo, nuestra salud colectiva se vio vulnerada por la amenaza del COVID-19. Aun así, debemos como sociedad, nación y miembros de una comunidad con vida propia, mantener el ritmo de la cotidianidad lo más normal posible.

Más allá de las medidas de bioseguridad que son inquebrantables, pues sería anormal romper alguna de esas normas, es importante que nos tomemos un tiempo para repensar cómo seremos de ahora en adelante.

¿Cómo nos imaginamos el regreso a la escuela o a la universidad? ¿Cómo nos recrearemos con otras personas? ¿De qué manera venceremos los obstáculos que se presenten en esa nueva cotidianidad? Sobre todo es importante reflexionar sobre cómo nos sentimos, qué ideas tenemos con respecto a la normalidad, o es qué nos tendremos que convertir en una sociedad anormal para rehacer una normalidad diferente.

Sin duda el reto que tenemos por delante es enorme. No se trata de regresar al trabajo, o a la escuela, o a la diversión sin más ni más. Realmente sería útil hablar con nuestros seres queridos y cercanos sobre estos nuevos retos que ya nos tocan a la puerta de nuestra cotidianidad, tomarse el tiempo necesario para conversar sobre qué hacer para construir una nueva normalidad que permita el cuidado colectivo, el desarrollo de nuestras potencialidades y la participación protagónica en la construcción permanente de nuestra Venezuela.

Se trata de ir más allá de la normalidad, para crear nuevos espacios que nos permitan fundar nuevas dinámicas de relaciones y de interacciones a favor de nuestro bienestar psicosocial, pero seguros que cuando inventemos esos nuevos espacios estemos haciéndolo pensando en lo primordial que es cuidar a otros como nos cuidamos a nosotros mismos. Sólo desde la interacción social comprometida y responsable podemos avanzar hacia una nueva normalidad donde podamos seguir siendo valerosos, responsables y sobre todo empáticos y afectuosos entre nosotros, haciendo de la nueva normalidad una nueva forma de apoyo colectivo.

Les saluda, el Dr. César Pérez Jiménez, y esto es Psicología para el pueblo.

Si quieres participar en esta sección aportándonos ideas sobre temas para discutirlos en perspectiva psicológica, recuerda que puedes hacerlo a través de mis redes sociales.

César Pérez Jiménez, en Facebook y en Instagram en @rinconlibrero




martes, 16 de marzo de 2021

Contenidos de Somos UBV 14 - Transmitido el 14 de marzo de 2021


 

Un concepto se puso esta semana de moda, como ocurre cada cierto tiempo, el de "autonomía universitaria". En verdad, hay unas palabras que la sociología al uso de la opinión pública que los medios acostumbran ventilar para mantener agitada a la clase media del país, cada tanto asoman porque son buenos para agarrar centimetraje. Lo hacen con sobrada hipocresía, pero la verdad, no se le puede pedir peras al olmo. Esta vez repito fue autonomía universitaria, hace tiempo fue sociedad civil, de vez en cuando meritocracia. Y así van, de frase en frase, en la que concentran prejuicios, racismo, discriminación, para de paso autoelevarse, autodenominándose ellos sí sociedad civil en guerra despreciativa contra la sociedad incivil; ello sí, aristocracia con méritos contra el perraje; ellos sí universitarios autónomos contra las pseudo universidades y los universitarios adictos al régimen. Falacias. La sociedad civil festejó las guarimbas y el linchamiento. Los meritócratas importaban ciencia y tecnología y boicotearon todos los esfuerzos por construir desde dentro de sus instituciones un pensamiento y una tecnología independiente y soberana. Ellos en su afán de crear republiquetas hicieron de las universidades elefantes blancos hinchados de renta petrolera. Hoy, cuando el bloqueo y la asfixia petrolera dejaron al desnudo las enclenques estructuras del parasistismo económico, las universidades quedaron desmanteladas. Y los pocos universitarios y universitarias que lucharon durante décadas contra las autoridades y los rancios esquemas de dirección, tratan entre los escombros y las ruinas, de levantar el espíritu indómito de la investigación, de la creación, haciendo renacer como el Fénix el ideal de universidad robinsoniana, el único que debía haber prevalecido contra el que se impuso afrancesado primero, agringado después, colonial siempre. Pues bien, hoy cuando el Estado está buscando mecanismos para vencer la asfixia, eludiendo las formas financieras y bancarias, para que los recursos rindan y no vayan al saco roto, al barril sin fondo de las élites universitarias, reñidas ha décadas con el hacer universitario humanístico y científico. Frente a esta histórica realidad, conocida por todos, la reacción grita desaforada que atacan su autonomía. Autonomía que ha servido para todo, menos para producir conocimiento autónomo. Antes bien, ha sido de patente de corso para constituirse en un estado dentro del estado, vale decir, en un espacio sin ley, en un fondo particular de familias apellidadas, que manejan espacios públicos como fundos, como haciendas particulares. Desde la UBV apoyamos y reivindicamos el concepto de soberanía en lo que importa. En lo que aporta para ser un espacio de pensamiento irreverente, que va al pueblo porque viene del pueblo, y, en esa dialéctica, construye saberes que buscan transformar la realidad, solucionando los problemas de todos y todas, aquellos que tienen que ver simbólica y concretamente, con la producción de alimentos, de salud, de vivienda, de vestidos, en fin, la que hace posible soñar y construir una realidad digna, amante de la vida.


 


martes, 9 de marzo de 2021

Editorial - Somos UBV Radio 13, transmitido el domingo 7 de marzo de 2021

 


Voy a plantear un concepto personal que me ha ayudado a comprender muchos fenómenos de la historia reciente o contemporánea. Es este: el capitalismo no es en rigor, estrictamente, un sistema económico, sino un modelo de organización social que emplea la fuerza y la violencia para establecer mecanismos de dominación que hagan posible y natural a a fuer de costumbre, que los ricos sean ricos y los pobres, pobres. Que los ricos que no trabajan, sean sostenidos por los pobres que trabajan las más de las veces, en terribles condiciones. El capitalismo pues, ha invertido los conceptos. Con la palabra trabajo, encubre el robo. Con la palabra desarrollo, tapa la destrucción. No es un sistema económico, porque economía significa: administración de la casa. La palabra viene del griego antiguo: oikos, que significa casa y nomos, administración. Resulta entonces, a la luz de los acontecimientos, que el capitalismo ha mal administrado de tal manera los recursos, que ha puesto al borde de la destrucción, la casa. Es decir, el planeta, que es la casa común, la casa de todos. El capitalismo es pues, un sistema antieconómico, y sobre todo, irracional, pues envenena el agua que bebe, destruye el bosque y contamina el aire que respira. Corta la rama en la que está sentado. Y todo esto lo hace ensoberbecido, con altanería, con petulancia. En sus maneras, en su andar, va diciendo y como demostrando, que se las sabe todas, que tiene todo bajo control, sólo porque esconde bajo la alfombra, con la ayuda de los medios, la muerte y destrucción que va dejando a su paso. Nos toca a los pobres, a los pueblos, denunciar su barbarie y tratar de poner los conceptos en orden o de pie, como decía el viejo Carlos Marx. Y cuando hablemos de trabajar, hablemos de producir bienes y servicios para la vida. Y cuando hablemos de economía, hablemos de administrar la casa, de administrar la escasez, para que alcance para todos y todas, como hacen precisamente las amas de casa, las ecónomas por antonomasia, nuestras madres y abuelas, que siempre piensan y protegen a los más importantes, a los niños y niñas, y a los ancianos, la memoria de los pueblos, todos ellos en los que menos piensa el capitalismo que lo ve todo al revés. O que no ve, o mejor invisibiliza, como lo hace con los niños y las mujeres. A los primeros, explotándolos en trabajos terribles, sin educación y sin juego, como cuando los hunde en las minas, y a las segundas, por un lado convirtiéndolas en cosas u objetos, o reconociendo por su trabajo menos de lo que le paga a los hombres, cuando no borrándolas hasta del lenguaje que si nombra a los científicos no ve a las científicas, o si nombra a los doctores o médicos, no ve a la médicas y doctoras. En el capitalismo, son los niños, mujeres y ancianos los que llevan la peor parte, porque es un sistema patriarcal, misógino, que desprecia la vida. En el marco de estas ideas, recordamos hoy a la mujeres trabajadoras que un 8 de marzo de 1857 salieron a las calles de Nueva York para protestar por las míseras condiciones en que laboraban. Y el 08 de marzo de 1908 la huelga con las mismas exigencias, que siete días después arroja un saldo trágico: 129 mujeres mueren en un incendio en la textilera Cotton Textile Factory, también en New York provocado por el dueño de la fábrica, que quería encerrando a las trabajadoras, impedir la protesta. La precursora del feminismo, Clara Zetkim nacida en Alemania en 1857 propuso en la Segunda Conferencia de Mujeres Socialistas que tuvo lugar en Copenhague, Dinamarca, el 27 de agosto de 1910, que el 8 de marzo fuese considerado Día Internacional de la Mujer en homenaje a esas 129 costureras que murieron exigiendo un sueldo digno, la reducción de la jornada de trabajo a diez horas y la prohibición de utilizar mano de obra infantil. Pero en febrero de este año, en Marruecos en una fábrica clandestina ubicada en un sótano mueren 28 personas electrocutadas, entre las víctimas, 17 mujeres. Las mujeres y los niños, el corazón de la vida, conocen el trabajo esclavo. En las maquilas que sostienen el consumo capitalista, son encadenadas a sus puestos de trabajo en jornadas de hasta 16 horas con restricciones hasta para ir al baño y cuando se inicia un desastre no pueden huir o las puertas están cerradas por fuera. El capitalismo es la legalización de la barbarie. No genera riqueza sino pobreza y el 1 por ciento de los ricos que acumula privilegios usa la propaganda, el chantaje, pero sobre todo la violencia, para sostener un régimen que está destruyendo las bases de la vida y del futuro. Luchar hoy por los niños, las mujeres y los ancianos, es una tarea impostergable, y denunciar el horror capitalista una causa que nos debe encontrar a todas y a todos los que creemos que otro mundo es posible. Sólo juntos y juntas, venceremos!

viernes, 5 de marzo de 2021

Psicología para el pueblo / ¿QUÉ ES LA GUERRA PSICOLÓGICA?

Por: César Pérez Jiménez

Psicología para el pueblo es un espacio comunicacional centrado en preguntas que circulan en el sentido común de las comunidades locales, las cuales son respondidas desde el campo de la psicología como parte de la formación ideológica y popular de la colectividad.



La Guerra Psicológica busca ganar los corazones y las mentes de las colectividades mediante un conjunto de estrategias y operaciones bélicas, destinadas a controlar y modificar las ideas, emociones y comportamientos personales y sociales. Su objetivo es que nos sintamos inseguros, cansados y desmoralizados, confundidos con respecto a la propia realidad. Estamos en guerra psicológica cuando creemos ciegamente la información publicada en los medios de comunicación, por el tipo de noticias que leemos o escuchamos, por la información no verificada compartida en nuestras redes sociales, y en nuestras conversaciones cotidianas con los otros hablamos de los problemas y no de las soluciones. Estas informaciones se elaboran en laboratorios comunicacionales como campañas de propaganda para crear una sensación de insatisfacción colectiva y promover el abandono de las luchas sociales. Les saluda, el Dr. César Pérez Jiménez, y esto es Psicología para el pueblo.

 

¿CUÁNDO ESTAMOS EN GUERRA PSICOLÓGICA?

Estamos en Guerra Psicológica cuando los medios de comunicación de masas y redes sociales nos bombardean de información sobre la hiper-especulación, las alianzas diplomáticas contra la nación, las sanciones imperialistas, y las amenazas militares extranjeras contra Venezuela; también, cuando los precios se elevan y afectan nuestra economía y rutinas diarias. Ante esto, experimentamos inseguridad, ansiedad, desesperanza, tristeza, miedo, frustración, confusión, hasta el punto de no saber qué hacer y mostrar comportamientos erráticos, es decir dejamos de sentirnos bien. Les saluda el Dr. César Pérez Jiménez, y esto es Psicología para el pueblo.

domingo, 28 de febrero de 2021

Editorial - Somos UBV 12 - Transmitido el 28 de febrero de 2021

 


 

Voy a aprovechar este editorial para comunicar una noticia extraordinaria, la conformación de un Consejo de Productores y Productoras en la Comunidad Agroecológica UBV Cacique Mara. Un sueño largamente acariciado que. con empuje, voluntad, cooperación, se está haciendo poco a poco realidad. Y digo largamente acariciado porque se remonta a los primeros años de fundación de nuestra universidad, de cuando se hablaba de Núcleos de Desarrollo Endógeno y era la prédica del Comandante Hugo Chávez cuando, veía visionario como era, que la única manera de lograr la soberanía, era produciendo. ¿Se acuerdan que en la época de bonanza, Chávez hablaba de gallineros verticales? Pues bien, en eso consistía su liderazgo, sembrar profundamente en el pueblo venezolano, advertir los tiempos que venían, porque la larga historia de la dominación imperial conoce de bloqueos y asfixias, y sólo resisten los que se organizan para la producción, haciendo mano de los recursos materiales y espirituales que se tengan. Es así como la sede de la UBV en el Zulia, localizada en el oeste de la ciudad, zona como sabemos altamente rica en agua y en tierras fértiles, debió desde un principio enfocarse en su entorno natural y dedicarse a la producción, sólo que el petróleo y la renta no nos permitía ver lo que Chávez veía y lo que la lógica histórica enseñaba. Y por mucho tiempo seguimos haciendo lo que todas las universidades, dando clases hablando de un país irreal, aéreo, de problemas muchas veces abstractos o teóricos, pero de esa teoría desanclada, que no busca resolver ni transformar la realidad. Mientras tanto, las comunidades campesinas seguían allí a nuestro lado, y en algunos momentos eran miradas de manera tímida o recelosa, pero nunca como aliadas. Hasta que la guerra híbrida llegó desmantelando infraestructura y creando condiciones para que ocurriera el previsible desenlace, que la UBV se fuera de La Retirada, literalmente con las tablas en la cabeza. El sabotaje eléctrico nacional fue el puntillazo final y sí, nos fuimos, y fue en ese momento que los vecinos hacen presencia para proteger instalaciones que pese a la distancia paradójica, sentían suyas. Corazón había porque no siempre hubo distanciamiento ni hostilidad, nuestro comedor alimentó por mucho tiempo a sus niños, y en época de vaguadas e inundaciones, fuimos albergue. En todo caso, el poder popular hizo lo que debía hacer, proteger espacios y territorios, para rescatar, para poner a salvo y aguardar tiempos mejores. La Gobernación del Estado Zulia nos brindó un inmenso apoyo en el rescate de bienes y nos preparó para esta nueva etapa que, junto a la Alcaldía Bolivariana de Maracaibo, se está construyendo desde las bases, desde el agua y la tierra, desde la semilla que es el pueblo organizado y consciente. No fue sólo entonces ni se trata de una mera ocupación sino de comenzar con gestión propia a levantar la producción. Y tras ese ejemplo de caer y levantar, llega, recapacita, reflexiona la UBV y comprende que en alianza productiva y estratégica, la Sede de la UBV con todo su potencial humano y científico, puede convertirse en centro y polo de desarrollo. En este marco y escenario, la Alcaldía Bolivariana se ha volcado al acompañamiento y a generar las condiciones para impulsar la producción local y, en acuerdo con la UBV. convenir en una estrategia mancomunada que nos permita producir vegetales, hortalizas, leguminosas, miel y proteína animal, en crear un laboratorio de prácticas agroecológicas, en un banco de semillas, en un vivero, en una escuela social, en un espacio de formación para la juventud, y, especialmente, en una universidad que investiga y enlaza, que abona y siembra para construir desde la raíz una patria inexpugnable. Con el Gobierno Nacional, con la Universidad Bolivariana de Venezuela, con la Gobernación del Estado Zulia, con la Alcaldía Bolivariana de Maracaibo y la Comunidad Agroecológica UBV Cacique Mara, unidos, venceremos.

domingo, 21 de febrero de 2021

Editorial - Somos UBV 11 - Transmitido el 21 de febrero de 2021

 



Seguimos en febrero rebelde. Fechas que no solo indican eventos históricos, sino signos de un derrotero histórico, hitos o marcas como de un mapa hecho de tiempo que se sobrepone y recubre esta nuestra tierra de libertadores y libertadoras, tierra rebelde que expulsó al imperio español y hoy enfrenta con gallardía al imperio criminal de los EEUU en su fase más peligrosa, la de desesperación, porque sabe su élite plutócrata que se le acabó el tiempo, que otras potencias emergen, que su moneda respaldada por un ejército genocida está en franca desventaja y en retirada, y que sólo tiene para seguir presionando y chantajeando, la extensa red mundial de ladrones y agiotistas que controlan la desquiciada economía capitalista.

Hoy, pese a todas las dificultades, estamos venciendo. Ha sido muy fuerte, muchos y muchas han caído a destiempo, cuando estaban en la más luminosa juventud, la madurez de sus fuerzas creadoras, o en la sabia hora de sus días, cuando más tenían y podían enseñar. 

El virus sembrado por este sistema necesitado de una razzia social, de una anunciada por sus perversos voceros, limpieza sanitaria, que se ve incluso en la forma mezquina con la que esconden, comercian, boicotean, las vacunas a la población, cuando antes, por sus supuestos muy robustos sistemas de salud colapsados ya habían y siguen muriendo millones de inocentes enterrados en fosas comunes o cremados en hornos inhumanos. Este virus pues, nos ha puesto a prueba y hoy la población, fuera del trato irracional de los medios y de sus intereses contrarrevolucionarios, aguarda la hora de ser vacunada según las naturales prioridades que impone la razón y la justicia. Confiamos en las medidas y en la conducción del gobierno nacional, y llamamos a la reflexión a aquellos que inconscientemente desestiman la enfermedad.  

Querían los enemigos de la patria que el país colapsara. Detestan que las cifras no hayan sido lo espantosas de Colombia, Brasil Perú, Ecuador, EEUU, la meca del Covid. Querían que el país implosionara y que el virus les hiciera el trabajo que ellos no han podido hacer ni con todos los millones que les han depositado para ello. Venezuela sigue en pie y con recursos disminuidos pero con entereza y entusiasmo, sale adelante venciendo la adversidad. 

Pero antes de cerrar este editorial quería recordar un pasaje. El 19 de febrero de 1824 fue rechazado por el Congreso Colombiano, un Convenio de comercio firmado por Colombia y México que concedía un tratamiento preferencial, en la calidad de miembros de la gran hermanda hispanoamericana. Y lo rechazó porque el Vicepresidente Santander ya había firmado sendos tratados de comercio con los EEUU y Gran Bretaña otorgándoles sin reservas, el privilegio de la nación más favorecida. 

Este favor era excluyente y exclusivo y obstruía las puertas al sueño de integración latinoamericana y daba al traste con los esfuerzos diplomáticos del Libertador a través de su canciller Miguel Santamaría, enviado a México por Simón Bolívar que estaba empeñado como estaba en lograr el Congreso Anfictiónico. Y el convenio fue rechazado, precisamente, porque desde entonces, la Colombia santanderista que hoy la desangra, estaba ya sembrando la sociedad conservadora, terrateniente y oligárquica, lacaya de los EEUU que la gobierna y desde hace 200 años ha ido entrelazando sus profundas raíces con la tierra de las fosas comunes donde ha ido a parar el pueblo ansioso de paz. Como vemos, la historia nos sigue hablando, recordando, y reafirmando; que, para vencer, necesario es persistir. Sigamos juntos.

domingo, 14 de febrero de 2021

Editorial 10 de Somos UBV Radio, transmitido el 14 de febrero de 2021



Somos UBV llega a su edición número diez. Son pocas, pero significativas. Una vez que sale el programa y miramos hacia atrás, vemos el esfuerzo, el trabajo, la dedicación. Pero no podemos quedarnos ahí, sino de inmediato, comenzar a mirar el próximo. Es un equipo animado, que está aprendiendo y se siente bien acompañado. Que agradece el inmenso apoyo incondicional de Eclipse 88.3 en la dirección de Gerardo Núñez y todo su equipo y de Tricolor 92.7, dirigida por nuestro locutor, el profesor Antonio Fernández, quien además se encarga de recibir todos los materiales que en esta época de pandemia le llegan vía electrónica y hacer milagros con los diversos tonos, con los ruidos, con las marcas a veces de la precariedad de algunos equipos, hacer milagros digo, con la edición. 

Y a todo ese material, le suma su potente voz, su criterio y gusto musical, para darnos a todos y a todas, un programa que nos llena de orgullo y satisfacción. Y todo esto ocurre como testimonio de un fervor por la patria y su construcción cotidiana. La que desde la UBV se hace y refleja. Pero que a su vez es un eco de aquel amor que hace 200 años se ofrendara para darnos la libertad que hoy defendemos. Sí, en 1814, el 12 de febrero, unos jóvenes se inmortalizaban poniendo sus pechos a los embates de un ejército feroz, cruel, sanguinario, el ejército de Boves. Hordas realistas que después vencieron en la batalla de La Puerta el 15 de junio de 1814 y cuando ya nada los detuvo para llegar a la ciudad de Caracas, en el mes de julio de ese mismo año, provocaron que toda la población migrara a Oriente para buscar salvar sus vidas, movimiento por cierto, guiado por Bolívar en las terribles horas de angustia de aquellos años de guerra social que anegó de sangre el territorio nacional. 

Pues bien, contra ese ejército que había hecho de terror una práctica, se enfrentaron bajo la arenga de Ribas "no podemos optar entre vencer o morir, necesario es vencer" y los jóvenes inexpertos en el manejo de armas, vencieron. Porque más puede la voluntad, el arrojo, la pasión y la firmeza, que la violencia de los cobardes. Hoy, nuevamente, nuestros jóvenes estudiantes, los que están aprendiendo a amar, nos dan lecciones de valor y se enfrentan a la opresión y al bloqueo, diciéndole sí a la patria. 

Y como joven es todo aquel y aquella que ama, esta Venezuela nuestra, aguerrida, celebra el amor y la entrega a la construcción cotidiana del socialismo. En un sólo amor, en un movimiento, una energía en la que se conjugan, saberes y conocimientos, ciencia y tecnología, para vencer el rentismo y las secuelas de un sistema económico fraguado en la dependencia y el parasitismo, y levantar con esfuerzo y talento propio, una economía soberana, libre, e independiente, capaz de dialogar con dignidad con los pueblo que, como el nuestro, han decidido enfrentar al imperialismo y su programa de destrucción sistemática del mundo. Contra ese gigante de siete leguas como lo llamara el apóstol de la revolución cubana José Martí, hoy nos enfrentamos blandiendo un solo puño, latiendo en un solo corazón. Sólo juntos, venceremos.

martes, 9 de febrero de 2021

Editorial 09 del programa radial Somos UBV que se transmite por Eclipe La Popular 88.3 y Tricolor 92.7


Llegó febrero y el pueblo venezolano lo recibe rebelde. Eso aprendimos con Chávez desde aquella madrugada del 92 cuando amanecimos no de golpe sino de rebelión. Porque los golpes de estado los aúpa la CIA y el Departamento de Estado y lo que hizo Chávez en una década infiltrado en el ejército puntifijista, fue construir un movimiento imbuido de la moral y la ética de los libertadores, para dar un martillazo a la taza de cristal de la falsa democracia adeco-copeyana. Como el oasis de Piñera en Chile, la nuestra fue durante cuatro décadas ejemplo de cómo se mantenía a raya a una población sometida a un empobrecimiento sistemático y al robo de sus recursos, bajo la cobertura y el adormecimiento mediático. Pero la vitrina se rompió el 27 de febrero de 1989, cuando el pueblo venezolano salió a la calle para decirle no al neoliberalismo, después del ensayo entre comillas exitoso llevado a cabo por Pinochet. En efecto, la escuela de Chicago y sus muchachos estaba probando a extender un Chile, dos, tres Chiles, sembrando el modelo neoliberal hasta lograr el ALCA y alcanzar así el sueño americano más acariciado, una doctrina Monroe sin cortapisas, configurando las relaciones de sumisión con el patio trasero y sus perritos domesticados. Pero no. El pueblo venezolano dijo no y tres años después. un joven militar de piel tostada y voz firme asumía la responsabilidad de los hechos en un país donde nadie se responsabilizaba de nada. Desde entonces, Bolívar se hizo Zamora y Zamora Chávez, un solo hilo hecho historia y revolución. Y en el 2005, tras fracasar el golpe de Estado de 2002 y el sabotaje petrolero, Chávez declaró muerto el Alca y las tres cabezas del monstruo se retorcieron y juraron acabar la revolución bolivariana a como diera lugar. Hoy seguimos en nuestro país asediado dando la batalla contra el modelo neoliberal en su etapa de desesperación pandémica, con la cual busca, lejos de cualquier racionalidad, destruir la economía para imponer el pillaje. A esa destrucción de las bases productivas, al desmantelamiento de la infraestructura del país, al hurto de sus profesionales, a los ataques a la moral y a las bases culturales del pueblo, a eso lo llaman desde el imperio "lucha por la democracia". Invierten en desestabilización y terrorismo, tanto como invierten el sentido de las palabras: en su jerga, los ataques son quirúrgicos, las bombas son inteligentes, hay asesinatos selectivos, falsos positivos, daños colaterales, terapias de shock, destrucción creativa, y un largo y cínico etcétera. La lucha hoy es devolver el sentido verdadero a las palabras y construir a punta de realidad un discurso cónsono, que diga lo que sucede y que haga lo que se piensa y dice. Todo un reto. Y es desde las universidades, y en particular desde la UBV, donde las palabras deben encarnar en acciones que transformen la realidad. Decir y hacer, de manera responsable es y será siempre un acto de rebeldía cuando lo que se quiere imponer es el fariseísmo, la demagogia, la hipocresía. La verdad es revolucionaria, nos dijo siempre el comandante Chávez. Digámosla, y hagámosla.

Sigamos juntos, solo así, venceremos!